El sector ovino enfrenta uno de sus mayores desafíos: la falta de relevo generacional y la necesidad de garantizar derechos laborales adecuados para quienes dedican su vida al pastoreo. El pastoreo es una actividad de dedicación completa, 365 días al año, que demanda atención continua, incluso cuando la tecnología permite pausas en otros ámbitos laborales. Conscientes de esta realidad, el proyecto Pastores de Emergencia surge como una innovadora propuesta que busca hacer la vida más fácil a los ganaderos, ofreciendo apoyo en momentos críticos y fomentando la profesionalización del sector.
El proyecto Pastores de Emergencia nació de una situación cotidiana en el medio rural: un pastor sufrió un accidente y no contaba con nadie que pudiera hacerse cargo de su ganado. Inspirado en modelos europeos, donde esta figura lleva décadas funcionando, el joven pastor Zacarías Fievet decidió poner en marcha esta iniciativa en Aragón. Desde octubre de 2023, ya son ocho pastores trabajando bajo este sistema, de los cuales cuatro dedican el 100 % de su jornada laboral al proyecto. El éxito ha sido rotundo, logrando realizar casi 100 servicios en un año y alcanzando a 45 ganaderías en la mitad norte de España.
Los servicios ofrecidos por Pastores de Emergencia abarcan desde dos días hasta un mes de duración, respondiendo a necesidades tan variadas como bajas médicas, vacaciones o momentos de alta carga laboral. Aunque la tarifa establecida es de 90 euros por jornada —que incluye desplazamientos, alojamiento y otros gastos—, los propios clientes reconocen la calidad del servicio, considerándolo esencial en muchos casos. La iniciativa no solo cubre una necesidad urgente, sino que también garantiza la seguridad y dignidad laboral de los pastores.
Además de ofrecer apoyo directo a los ganaderos, el proyecto impulsa la formación y la creación de redes de colaboración. A lo largo del último año, se han organizado jornadas de encuentro y capacitación, donde los pastores del grupo han participado en talleres de adiestramiento canino y formación jurídica, consolidando así una comunidad profesional que apuesta por el aprendizaje continuo. A pesar de los éxitos obtenidos, el principal reto actual radica en equilibrar la creciente demanda de servicios con la disponibilidad de pastores capacitados.
Para formar parte de Pastores de Emergencia, los candidatos deben contar con al menos diez años de experiencia, lo que garantiza la profesionalidad y el alto nivel de cualificación de quienes integran el equipo. La respuesta positiva de los ganaderos es una muestra clara de la necesidad y efectividad del proyecto, aunque todavía queda mucho camino por recorrer para cubrir toda la demanda existente. La profesionalización del pastoreo es clave para asegurar el futuro del sector ovino, especialmente en regiones donde esta actividad sigue siendo fundamental para el desarrollo rural.
Este interesante proyecto se presentará en la Feria Churra el próximo 26 de abril a las 17:45 h en el Salón de Actos del Mercado Comarcal de Ganado. Será una excelente oportunidad para conocer de cerca esta propuesta innovadora y debatir sobre los desafíos que enfrenta el pastoreo en el contexto actual.
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