CH37 acoge este año entre sus patrocinadores a la D.O. Cigales, una denominación que va a estar vinculada a una acción gastronómica muy concreta de la Feria Churra, el bocadillo Paquito de Interovic.
Conoce más sobre esta Denominación de Origen cuyos viñedos se encuentran a una altitud media de 750 metros y comprenden desde parte del término municipal de Valladolid (Pago “El Berrocal”), hasta el palentino de Dueñas, incluyendo además Cabezón de Pisuerga, Santovenia de Pisuerga, Cigales, Corcos del Valle, Cubillas de Santa Marta, Fuensaldaña, Mucientes, Quintanilla de Trigueros, San Martín de Valvení, Trigueros del Valle y Valoria la Buena.
La Denominación de Origen Cigales ha vivido momentos de cambio en su organización y en la interpretación de sus vinos, siempre respetando su identidad marcada por una gran personalidad que transfieren sus viñedos y el trabajo de los profesionales que forman parte de la familia de la Denominación. Y hablamos de familia porque Cigales es una zona vitivinícola pequeña y coqueta, ubicada en las provincias de Valladolid y Palencia con cerca de 2.000 hectáreas y 30 bodegas inscritas. La mayoría son empresas familiares en crecimiento pero no hay que olvidar los grupos bodegueros que se han asentado en la zona y los que vienen para integrarse en la Denominación.
El cambio organizativo del que se habla es el proceso de adaptación a los criterios marcados por la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC) para la acreditación en la Norma UNE-EN-ISO 17065 que implica más independencia a las bodegas acogidas a la Denominación de Origen. Un arduo trabajo que implica verificar el origen y calidad exigida para la certificación del vino de la DO Cigales.
Junto a estos cambios, la Denominación se acerca más al consumidor y se adapta a sus preferencias. Siempre acorde a su identidad, la Denominación ya fue pionera en 2011 con la incorporación de blancos, dulces y espumosos para incrementar los tipos de vino permitidos en origen, rosados y tintos. Si bien, Cigales se identifica por la elaboración de rosados, no hay que obviar, que desde su creación en 1991 la posibilidad de tintos siempre ha estado presente, hasta el punto que la producción de ambos vinos ha supuesto el 50%. Además, junto a las variedades de uva principales, Tempranillo, Garnacha, Garnacha Gris, Albillo y Verdejo, se incluyeron como complementarias Cabernet Sauvignon, Merlot, Syrah y Sauvignon Blanc.
En 2019, la DO Cigales modificó su pliego de condiciones, es decir, la normativa interna que especifica cuáles son las características de sus vinos, entre otros aspectos técnicos. Uno de los cambios más significativos es ampliar la gama cromática de los rosados elaborados en la Denominación que van desde un rosa pálido hasta los fresa más emblemáticos de la Denominación. La gran baza de la Denominación es que no pierden su estructura y aromas propios de la comarca vitivinícola de Cigales.
En definitiva, las características organolépticas de los vinos se han adaptado buscando una descripción más exacta del vino para que puedan ser evaluados por un panel sensorial independiente que cumpla los criterios de la Norma UNE-EN-ISO 17025. En 2022, se volvió a modificar el pliego de condiciones y eliminó la distinción entre variedades principales y secundarias e incluyó la variedad Garnacha Blanca y Tintorera, ya instauradas con éxito en la comarca vitivinícola.
Buscando el incremento de las ventas y la identidad de la comarca vitivinícola, esta acreditación supuso un reconocimiento nacional, europeo e internacional que afianza la fiabilidad de los controles y representa una garantía para los consumidores de vino de Cigales. Con todo este trabajo, la Denominación de Origen Cigales se muestra optimista con grandes expectativas de futuro que implique un mayor posicionamiento de nuestros vinos en el mercado.
Comentarios recientes