Este año, nuestra querida Raza Churra celebrará su tradicional hermanamiento con la Raza Manchega, un encuentro que refuerza los lazos entre ambas razas autóctonas y pone en valor su importancia en la ganadería y la cultura de nuestra tierra. Será una ocasión especial para compartir experiencias, intercambiar conocimientos y seguir impulsando la conservación y mejora de estas razas tan emblemáticas.

Hoy el presidente de AGRAMA, Antonio Martínez Flores, reflexiona sobre la importancia de la oveja manchega y los desafíos del sector ovino en Castilla-La Mancha.

En los últimos años, la mejora genética ha permitido avanzar en productividad y calidad. ¿Cuáles son los logros más destacados hasta ahora y qué aspectos siguen siendo un desafío para los ganaderos de la raza Manchega?

El programa que se desarrolla en la raza ovina manchega ha tenido, como objetivo principal, la mejora de la producción de leche y, con ello, su rentabilidad económica, teniendo en cuenta las características específicas del sistema de producción, vinculado al compromiso de un abastecimiento estable y sostenible de leche con D.O.P. y de corderos para la I.G.P., en definitiva, la competitividad del sector productivo. Además, también venimos trabajando en la resistencia genética a EETs, y en la mejora de la morfología mamaria para su ordeño.

Si analizamos la producción de leche por reproductora en el sector ovino manchego de leche de los últimos 10 años, se ha producido un incremento de, aproximadamente, un 30-35%, que se acrecienta hasta más del 50% si nos fijamos en la mejora exhibida en las ovejas del núcleo de selección. Un dato que puede resumir este hecho, se basa en lo que representan el núcleo de selección en el conjunto del sector ovino de leche para la DOP, con un 23% de las ganaderías, un 28% del censo animal, y un 42% de la producción de leche destinada a transformarse en Queso Manchego.

El aumento del precio de los insumos, la presión de las grandes cadenas y la volatilidad del mercado afectan gravemente al sector. ¿Cómo está impactando esta situación a los ganaderos de ovino Manchego y qué medidas considera urgentes para garantizar su viabilidad?

El sector ovino manchego, casi siempre ha estado marcado por una estela de estabilidad, si exceptuamos una crisis en el año 2016 que propició una caída del precio de la leche (E.S.U) y una propuesta de contingentación de la producción, lo que llegó a provocar que, los 5-6 años que siguieron, se mantuviera la cota de producción (a pesar de llevar aparejada la desaparición de ganaderías y animales).

El año 2023 vino protagonizado por una gran demanda de leche con D.O. ante el aumento de las ventas de queso manchego en los mercados, ofertando precios a las ganaderías, por Extracto Quesero útil, muy altos, que se han mantenido hasta el último trimestre de 2024. Ha sido, posiblemente, la mejor campaña en los últimos 30 años.

De los más de treinta quesos con IGP-DOP de la UE, el queso manchego supone más de la mitad de la producción total.

A partir de ese momento, se advierte un punto de inflexión, con una caída en las ventas de queso y, en consecuencia, los precios de la leche se han rebajado, provocando una situación de incertidumbre entre los ganaderos.

Las medidas que seguramente haya que emprender, pasan necesariamente porque el sector ganadero y el sector quesero de la región, planifiquen y establezcan la estrategia a desarrollar en un marco mínimo de 5 años, estableciendo compromisos y acuerdos que redunden en el bien común del sector agroalimentario lácteo de Castilla La Mancha.

La DOP Queso Manchego es un emblema de la gastronomía española, pero algunos ganaderos denuncian que el precio de la leche no refleja su verdadero valor. ¿Qué estrategias propone Agrama para mejorar la posición del ganadero dentro de la cadena de valor?

Efectivamente, yo diría que el sector agroalimentario es un sector clave en Castilla La Mancha, y especialmente, lo que representa el Queso Manchego. No olvidemos que es la DOP de quesos, con más mercado y reconocimiento nacional y, sobre todo, internacional. De los más de treinta quesos con IGP-DOP de la UE, el queso manchego supone más de la mitad de la producción total (el resto de quesos, todos juntos, son algo menos del 50% restante)

Y esto es así, porque la leche proviene exclusivamente de una raza, autóctona, criada en un sistema de producción perfectamente adaptado a las condiciones agroclimáticas de la zona amparada, ligado al aprovechamiento de residuos agrícolas, eriales, monte bajo mediterráneo, etc., con un nivel de producción de leche por animal medio-alto y una calidad excepcional para su transformación en queso, lo que ha definido un producto especial. Por esa razón, históricamente, la leche con DOP siempre ha mantenido un sobreprecio que ha variado, frente a otras “leches” de oveja, desde el 25 al 30% aproximadamente, aunque pudiera no ser suficiente a criterio de algunos ganaderos.

Tampoco podemos obviar que, desde el año 2010, la producción de leche con DOP se ha duplicado, alcanzando los 100 millones de litros y, en momentos puntuales, como puede ser en la actualidad, puede representar un exceso de oferta, y provocar precios más bajos.

La lucha contra el cambio climático y la transición ecológica son claves en la ganadería del siglo XXI. ¿Cómo puede el ovino Manchego convertirse en un modelo de producción sostenible y qué papel jugarán las nuevas tecnologías en este proceso?

Ni que decir tiene que, como raza autóctona, desempeña un papel fundamental frente al reto demográfico y territorial fijando población (mejora social), impulsando actividades económicas en esas zonas rurales que generan valor añadido (incremento de la renta rural), pero también contribuye al mantenimiento de nuestros ecosistemas, de la biodiversidad, etc., en definitiva, practica una labor ambiental.  Refiriéndonos a esta último, está demostrado que los sistemas de pastoreo se comportan como sumideros de carbono, contribuyendo, además, a la reducción de la erosión del suelo y la mejora de la fertilidad natural del suelo; evita la proliferación de incendios forestales, favorece la dispersión de semillas, etc. En estudios en los que hemos participado, los resultados mostraron que es fundamental el manejo de la alimentación como estrategia de mitigación de los gases efecto invernadero, de la huella de carbono, etc., y se ha puesto en práctica sistemas de pastoreo (triticale) que aportan resultados sanitarios y económicos interesantes. Por tanto, nuestra apuesta en este sentido está más que asegurada.

El envejecimiento de la población rural y la falta de relevo generacional amenazan el futuro de la ganadería. ¿Cómo está trabajando Agrama para atraer a jóvenes ganaderos y qué incentivos considera necesarios para que el sector siga siendo atractivo?

El envejecimiento de la población rural es un hecho. La edad media de los ganaderos es muy alta, y la inmensa mayoría de los propietarios o responsables de las explotaciones se jubilarán en los próximos 10 años. Por tanto, se debe trabajar en conseguir nuevas incorporaciones al campo español, y no es una tarea fácil.

La falta de relevo generacional es consecuencia de la opinión, fundamentada, de que se trata de un trabajo que demanda mucho tiempo, de baja rentabilidad y escaso reconocimiento social, ligado a la necesidad de vivir en zonas rurales, poco pobladas y con menos servicios que en las ciudades, agravado, en las últimas décadas, con el cambio sociológico de la población española con todo lo que tiene que ver con la cría de ganado, el consumo de alimentos, etc..

Estamos, por tanto, obligados a un cambio de modelo a dos niveles:

  • Por una parte, soluciones que afectan a la mano de obra, mediante la transformación del patrón de ganadería tradicional (ya muy cambiada estos últimos años), orientando a una salida laboral acorde a las necesidades sociales, con mayor flexibilidad horaria, compatible con la conciliación familiar, descansos y vacaciones, y con salarios o rentabilidad económica.
  • Y por otra, desde el punto de vista empresarial, un perfil de trabajador más profesional que sea capaz de adaptarse a los cambios, con formación periódica, para modernizarse y utilizar las soluciones innovadoras tecnológicas que se van incorporando al sector y que se traducen en un mayor desarrollo socioeconómico.